En este curso corto no aprenderás a ser un/a experto/a ceramista ni un/a escultor/a, no te irás a casa con la mejor pieza que hayas creado en tu vida. Esa no es la idea. El objetivo de Sabrina para esta actividad es crear una comunión en el hacer, esa que se genera cuando se comparte una actividad en la que uno se encuentra a gusto. Es recrear lo que para ella ha sido la base de esta serie de esculturas, momentos en los que las mujeres de su casa se sentaban juntas alrededor de la mesa, cada una con su quehacer pero compartiendo charlas. Son las mesas familiares en donde cada uno iba un poco a lo suyo, pero a la vez se estaba en un mismo tema. En este taller, se recrearán esos espacios de intimidad.
La técnica cerámica es muy grata, muy relajante, pero hay que tenerle paciencia, no siempre se conecta con el barro en la primera. Por eso también si es tu primer acercamiento, te recomiendo que vengas con la idea de disfrutar del proceso y no de salir de aquí con alguna gran pieza.